No parece un contrasentido afirmar que un hombre sin miedo tiene miedo a una mujer sin miedo, ya que en realidad el hombre sin miedo (considerado asì mas que nada por su violencia) es un miedoso que le teme a la mujer sin miedo (considerada a sì por su 'aguante' a las injusticias y en la actualidad por su 'liberaciòn' ).
¿De dònde parte el apelativo sin miedo?, generalmente se le atribuye a quien esta en un grado màs alto o superior a otro.
Sabemos que toda vinculaciòn humana se hace de manera horizontal o vertical, entendièndose por horizontal aquella relaciòn de igualdad, de mutuo respeto con el otro, mientras que la otra , en la relaciòn vertical, habrà quien se sitùe màs arriba y otro màs abajo.
Es en la relaciòn vertical y concretamente entre un hombre y una mujer, que se construye una especie de aureola de superioridad para el que està arriba en la relaciòn que generalmente es el hombre, mientras que la mujer queda en un plano secundario de dependencia.
La historia anterior al presente, consigna desde el paleolìtico, que los hombres han tenido dominio sobre las mujeres. Los hombres por sus caracterìsticas fìsicas (fuerza), se ocupaban de las tareas màs duras que demandaban esfuerzo fìsico, lo que los llevò a ser dominantes de la especie. Ya sabemos que detràs de una superioridad se esconde el ànimo de seguir sièndolo, aunque para ello tengan que utilizar las armas fìsicas convertidas en violencia u agresiòn para quienes intenten levantarse de su estado de inferioridad.
Visto asì la situaciòn, el hombre se convirtiò en un supuesto sujeto sin miedo para la mujer, que lo aterraba con cualquier mètodo si èsta solìa hacerle un reclamo, aùn cuando èste fuera de lo màs justo.
La historia està plagada de actitudes prepotentes y de maltratos a las mujeres avaladas por las creencias y pràcticas sociales de cada època.
Afortunadamente en la actualidad esta situaciòn està reducida en proporciòn a la històrica y las mujeres han conseguido la reinvindicaciòn de sus derechos.
Las agresiones y maltratos aùn existentes son condenables y ha llevado a psicoanalistas y tambièn a otros intelectuales y pensadores a plantear su porquè.
La interpretaciòn facilista hecho por los psicoanalìstas atribuyen que en el fondo de toda agresiòn està la inseguridad del agresor, es decir una especie de proyecciòn de lo que realmente le sucede a esa persona.
La frase del escritor Eduardo Galeano viene a colaciòn para interpretar la acciòn de muchos varones que maltratan a las mujeres:
"El hombre tiene miedo a la mujer sin miedo".
Con esta frase Galeano ridiculiza al varòn maltratador, tildàndole de miedoso-cobarde que no tiene la valentìa de decir, 'lo maltratè, lo matè por miedo...'
¿Serà como lo plantea la psicologìa que el hombre sin miedo maltrata porque en sì es inseguro? y que Galeano especifica màs con lo de miedoso y cobarde?.
Resulta fàcil , superficial y parcial tal aseveración, igual a como lo plantean que el homofòbico es homofobico porque en el fondo esconde su homosexualidad.
Un anàlisis màs digerible del comportamiento del hombre 'sin miedo' lo encontramos en su ADN, el mismo que hace inundar todo su organismo de hormonas masculinas, que le dan el comportamiento y naturaleza de fuerte , àspero y rudo, mientras que el ADN de la mujer lo configura como un ser màs dèbil, sensible y delicada.
Asì està dada por la naturaleza la estructura basal de los seres vivientes, lo que se ve incluso en los animales donde el macho ostenta siempre la fortaleza.
Posteriormente serà el entorno, familia, escuela, sociedad, quien se encargarà de moldear, esculpir la conducta primitiva, el instinto violento del varòn por otro màs tolerante, permisivo y comprensivo para aceptar que hombres y mujeres biológica, psicológica y socialmente diferentes, diseñados para roles diferentes, tienen la misma dignidad y son polaridades complementarias.
Lo fundamental enconces es que los varones pegalones, violentos-sin miedo, son aquellos que no tienen aùn 'domesticado' ( por el entorno donde se han desarrollado ) su instinto violento.
Alrededor de este hecho fundamental se tejen las otras conjeturas dichas de orden psicològico, como tambièn sentimental y otros.
Habrà situaciones de un violento que lo sean por su inseguridad, otros lo seràn por miedo a que la fèmina los deje , y tal vez violentos, porque inconscientemente tienen miedo a perder su superioridad historicamente ostentada.
El hombre sin miedo y la mujer sin miedo en la pràctica son solo figuras retòricas, porque no lo hay, ambos tiene miedo en mayor o menor grado, aquellos a perder historicamente s instinto protector hacia la fèmina y como no, tambièn tiene miedo (aunque no lo reconozcan publicamente ) ante una fèmina de exuberante belleza fìsica y/o fuerte inteligencia. Y ellas pese a llevar adelante su idea de adoptar roles propios masculinos, tambièn tienen miedo a perder el apoyo (protecciòn ) del varòn- de su fuerza bruta, ante las fuerza brutas que se encuentran en la vida y miedo a dejar de ser amadas por la delicadeza de su figura fìsica y espiritual.
